Lombok es una joya todavía relativamente intacta dentro del mapa del surf en Indonesia. Esta isla, ubicada al este de Bali, conserva el espíritu de lo que alguna vez fue el surf en Bali hace décadas: pueblos tranquilos, naturaleza exuberante, spots secretos y un ambiente relajado con menos desarrollo turístico. Para muchos surfistas, Lombok representa una conexión más auténtica con el océano, con menos multitudes, más aventura y una energía más salvaje.
A diferencia de su vecina más famosa, Lombok no está saturada de tráfico ni de resorts. Aquí el surfista viaja en moto por caminos de tierra, conversa con locales en los warungs, y descubre playas sin nombre donde tal vez haya una ola rompiendo sola. La isla está dominada por el imponente volcán Rinjani en el norte, mientras que el sur se despliega en una sucesión de bahías, acantilados y headlands perfectos para generar rompientes consistentes durante todo el año.
Las principales zonas de surf se concentran en la costa sur, especialmente alrededor de Kuta Lombok, un pueblo que combina comodidades modernas con ambiente de mochileros y viajeros de largo plazo. Desde allí, en poco tiempo se puede acceder a una gran cantidad de olas: desde suaves picos para aprender hasta tubos profundos que desafían a los mejores del mundo, como en Desert Point.
El crecimiento turístico en Lombok ha sido más lento y orgánico, lo que ha permitido preservar buena parte de su esencia. Además, con nuevas carreteras y un aeropuerto internacional, hoy es más fácil que nunca llegar a Lombok y disfrutar de lo que muchos consideran el futuro del surf en Indonesia.
🌀 Menos gente, más espacio, olas de calidad y paisajes de postal: Lombok es ideal para surfistas que quieren escapar del ruido y reconectar con lo esencial del surf —mar, aventura y libertad—.